Azahar blanco del viejo Jerez
Noche sin luna en sus ancianas calles
Olores dulces de viajes en el tiempo
Que mece las hojas del naranjo que me mira
Te busco en los recuerdos y veo que eres Zahrah
Eterna memoria floreciente de mi memoria misma
Tu blanca piel, el papel de la historia de mi vida
Tu pelo negro la tinta de mis letras
Tus nombres llenan mi tasbih de ambar
Tu luz de estrella mis noches sin luna
Miro al naranjo y huelo Zahrah ahora
Siempre Zahrah, eterna floreciente